Eugenio Mendoza Goiticoa fue un empresario y filántropo venezolano destacado por las distintas empresas y organizaciones benéficas que fundó, llegando así a convertirse en uno de los hombres más influyentes del siglo XX en Venezuela.

Mendoza nació el 13 de noviembre de 1906 en la ciudad de Caracas. Fue el cuarto hijo de Eugenio Mendoza Cobeña y Luisa Goiticoa, quienes llegaron a tener un total de siete hijos: Luisa, Carlos, Concha, Eugenio, Lope, Pedro y Eduardo.  

Sus estudios los realizó en el Colegio de los Padres Franceses, ubicado en la esquina de Piñango. Con el paso del tiempo comienza estudios en el Liceo Caracas; aunque en lugar de culminar el bachillerato e ingresar a la universidad, Mendoza prefirió apostar por el crecimiento de Venezuela, impulsando ideas, así como la creación de empresas y fundaciones que mejorarán la calidad de vida del venezolano.  

 El 4 de noviembre de 1926 inicia su primera empresa mercantil en la firma de comercio Moisés Miranda & Cía, actuando como socio. El objetivo de la empresa era la compra y venta de materiales de construcción. Uno de los obstáculos que Mendoza tuvo que enfrentar en un principio eran los escasos recursos que tenía la organización, sumado al poco apoyo por parte de los inversionistas. Ya para el año 1932 compra las acciones a Moisés Miranda, quedando así como único accionista de la organización. Posteriormente la misma continuó operaciones, aunque bajo el nombre de Eugenio Mendoza h. & Compañía, denominación que mantendría hasta 1965 cuando cambia a Materiales Mendoza, C.A.

A pesar de que las empresas de Don Eugenio representaban importantes ingresos monetarios para el país. La pobreza, hambruna, corrupción administrativa, las viviendas precarias y  falta de educación seguían siendo problemas comunes en la Venezuela del siglo XX. Es entonces cuando Mendoza tiene la iniciativa de introducir por primera vez en la historia venezolana el concepto de Responsabilidad Social, cuando afirma que “si la empresa ignora a la sociedad, la sociedad terminará ignorando a la empresa”, palabras que pronuncia en el seminario Internacional “La Responsabilidad Empresarial en el Progreso Social de Venezuela”, realizado en Maracay, estado Aragua, en 1963. Un año más tarde y por impulso de Mendoza, se constituye el Dividendo Voluntario para la Comunidad, A.C. con la participación de 130 empresas, que en 1965 llegan a 370, donde trabajan en total 50 mil empleados y obreros y 1.500 ejecutivos.

Con esta nueva fundación Eugenio Mendoza quería recaudar más fondos para hacer posible sus distintos proyectos sociales y obras humanitarias. Adicionalmente buscaba reclutar personas dispuestas a contribuir con el cambio del país. Actualmente, el DVC cuenta con más de 60 empresas miembro, una importante cartera de proyectos y múltiples actividades que permiten, además la participación de los voluntarios pertenecientes a sus firmas aliadas. Asimismo, el DVC ha ganado reconocimiento internacional y asesoría para sus programas gracias a su alianza con la organización de solidaridad mundial United Way, a la cual representa en Venezuela.

Eugenio Mendoza Goiticoa fue un visionario que nunca dejó de trabajar por una mejor Venezuela. De hecho, es bien sabido, por el testimonio de muchos de sus familiares, que fue un hombre que siempre se negó a descansar, pues a su juicio siempre había algo que hacer. El 17 de octubre de 1979 Don Eugenio fallece, dejando tras de él un gran legado, no solamente para su familia sino también para todo el país.

La escuela humanística de Eugenio Mendoza persiste y será siempre la fuente de inspiración de todas las organizaciones que nacieron bajo su tutela, trabajando incansablemente por ese cambio que Venezuela se merece.